20/08/2019
Si eres propietario de un piso que deseas vender, seguro que lo que te interesa es conseguir venderlo rápido y, además, a buen precio. Pues bien, aunque parezca imposible, lo cierto es que existen algunas técnicas que resultan muy efectivas para lograrlo. Te explicamos las que más éxito suelen tener:
¿Cómo vender un piso rápido y a buen precio?
Prepara toda la documentación previamente
Antes de poner el piso en venta debes hacerte con toda la documentación que vas a necesitar. No es una buena idea recopilarla una vez has publicado el anuncio de venta porque nunca sabes cuándo va a llegar el comprador ideal. Quizá aparezca al día siguiente, y no está dispuesto a esperar unos días o unas semanas hasta que tengas toda la documentación en tu poder. Además, algunos tramites puede alargarse en el tiempo.
¿Qué documentos necesitas para vender el piso? Depende de la propiedad y la Comunidad Autónoma, pero generalmente destacan la cédula de habitabilidad, el certificado de eficiencia energética, el documento que acredita que estás al día en el pago de la cuota de la comunidad de vecinos y el recibo del IBI más reciente, entre otros.
Precio: haz un estudio de mercado
Una vez tengas en tus manos toda la documentación que necesitas como vendedor, es el momento de poner el piso a la venta. Lo primero es fijar el precio adecuado. Si realmente quieres venderlo rápido, tienes que ajustar el precio al valor real del mercado. Para ello, puedes realizar tú mismo un estudio de mercado o, si lo prefieres, contratar a un buen profesional inmobiliario. Dependerá de tu disponibilidad y urgencia, pero acudir a profesionales puede ahorrarte muchos dolores de cabeza.
Apuesta por una decoración neutra
Por supuesto, no debes olvidarte de poner a punto la vivienda para encontrar al comprador ideal lo antes posible. La técnica de Home Staging consiste en aplicar diversas herramientas de diseño y decoración en el inmueble para potenciar sus puntos fuertes.
- Despersonalizar: uno de los principios básicos de esta técnica de Marketing Inmobiliario es despersonalizar la vivienda. Cuando los posibles compradores acuden a visitar el piso lo que desean es verse viviendo en el inmueble, no conocer la vida de los anteriores propietarios. Es por ello por lo que resulta tan importante que retires cualquier objeto personal, como fotografías y elementos decorativos.
- Primera impresión: los potenciales compradores deciden en apenas 15 segundos si esa es o no la casa de sus sueños. Así, debes cuidar al máximo qué es lo primero que ven al entrar, así como la imagen que se recibe desde la puerta de cada una de las estancias.
- Menos es más: uno de los grandes principios de la decoración y del Home Staging es “menos es más”. El comprador que hacerse una imagen real de cómo quedará la casa amueblada, imaginándose sus propios muebles en el espacio disponible. Para ello, lo que tú debes hacer como vendedor es simplificar al máximo la decoración, eliminando todo aquello que sobra, especialmente en el salón y en el dormitorio.
- Colores: y, por último, para vender un piso rápido, una de las herramientas de decoración que no debes olvidar es la que indica la importancia de optar por los tonos neutros. Un piso a la venta tiene que ser atractivo para todo el mundo, independientemente de sus preferencias personales. Además, los colores demasiado intensos pueden hacer que el comprador pierda de vista el resto de los elementos. El blanco siempre supone un gran acierto.
Fotografías
Por último, es fundamental que consigas las mejores fotografías del piso en venta. Los interesados en comprarla se fijarán más en las imágenes que en la propia descripción del inmueble. Por lo tanto, las fotografías deben ser de buena calidad y, a ser posible, hechas con luz natural para que queden mucho más bonitas. Así conseguirás atraer la atención de las personas interesadas en comprar un inmueble.