La vivienda es la inversión de moda. En un contexto de escasa pujanza de la deuda pública y de los depósitos bancarios, el mercado residencial enfila 2018 como el año de su consolidación definitiva como principal foco de rentabilidad.

Cada vez se venden más casas, y los precios suben de forma notable. Por eso, con el comienzo del año, son muchos los españoles que se han fijado el objetivo de adquirir una vivienda en los próximos meses, ya sea su primera compra, como reposición o como inversión. Este último punto esta siendo muy relevante en los últimos trimestres. 

Lee la noticia completa aquí